La quimioterapia (quimio) usa medicamentos contra el cáncer que se inyectan en una vena o músculo, o se administran por la boca. La quimioterapia es una terapia sistémica, es decir que el medicamento entra al torrente sanguÃneo y viaja por todo el cuerpo para alcanzar y destruir las células cancerosas.
En pocas ocasiones, la quimioterapia resulta útil para la mayorÃa de los tipos de cáncer de tiroides, aunque afortunadamente no se necesita en la mayorÃa de los casos. A menudo, la quimioterapia es combinada con la radioterapia de rayo externo para el cáncer de tiroides anaplásico, y algunas veces se usa para otros cánceres avanzados que ya no responden a otros tratamientos.
Algunos medicamentos de quimioterapia más comúnmente utilizados para tratar principalmente el cáncer de tiroides medular y el cáncer de tiroides anaplásico son:
- Dacarbazina
- Vincristina
- Ciclofosfamida
- Doxorrubicina
- Estreptozocina
- Fluorouracilo
- Paclitaxel
- Docetaxel
- Carboplatino
Posibles efectos secundarios
Los medicamentos de quimioterapia atacan a las células que se están dividiendo rápidamente, razón por la cual funcionan contra las células cancerosas. Sin embargo, otras células en el cuerpo, como aquellas en la médula ósea, el revestimiento de la boca y los intestinos, asà como los folÃculos pilosos, también se dividen rápidamente. Estas células también son susceptibles a ser afectadas por la quimioterapia, lo que puede ocasionar efectos secundarios.
Los efectos secundarios de la quimioterapia dependen del tipo y dosis de los medicamentos administrados, asà como de la duración del tiempo que se administran. Los efectos secundarios comunes de la quimioterapia incluyen:
- CaÃda del cabello
- Úlceras en la boca
- Pérdida del apetito
- Náuseas y vómitos
- Diarrea
- Aumento de la probabilidad de infecciones (debido a que hay muy pocos glóbulos blancos)
- Tendencia a presentar fácilmente sangrados o moretones (debido a que hay muy pocas plaquetas)
- Cansancio (debido a que hay muy pocos glóbulos rojos)
Estos efectos secundarios son generalmente temporales y desaparecen después de finalizar el tratamiento. Muchas veces hay maneras de aminorar los efectos secundarios. Por ejemplo, se pueden administrar medicamentos para ayudar a prevenir o reducir las náuseas y los vómitos.
Puede que algunos medicamentos de quimioterapia causen otros efectos secundarios especÃficos que requieran estar en observación. Por ejemplo, la doxorrubicina (uno de los medicamentos de quimioterapia que se usa con más frecuencia para el cáncer de tiroides) puede afectar la función cardiaca. Si está tomando doxorrubicina, su médico examinará su corazón regularmente mediante pruebas como ecocardiogramas.